Bonos verdes: cómo financiar tu crecimiento cuidando el planeta

Los bonos verdes son instrumentos financieros diseñados para financiar proyectos con beneficios ambientales claros: desde energías renovables hasta eficiencia energética, manejo sustentable del agua, movilidad limpia y construcción verde.

Bonos verdes
Imagen de cortesía.

Al igual que un bono tradicional, el emisor se compromete a pagar al inversionista intereses durante un período determinado, pero los recursos están etiquetados exclusivamente para iniciativas sostenibles.

¿Por qué están ganando terreno?

Según la Climate Bonds Initiative, el mercado global de bonos verdes superó los US$ 600 mil millones en emisiones acumuladas en 2023, con un crecimiento sostenido gracias al interés de inversionistas institucionales y fondos que buscan activos alineados con criterios ESG (ambientales, sociales y de gobernanza).

En América Latina, el dinamismo también es palpable: México, Brasil y Chile lideran la región, con emisiones crecientes tanto del sector público como privado.

Ejemplos destacados:

Bancos de desarrollo

  • CAF (Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe) emitió un bono verde por US$ 750 millones en 2023, enfocado en proyectos de infraestructura resiliente y eficiencia energética.
  • El BID (Banco Interamericano de Desarrollo) ha estructurado programas de asistencia técnica para ayudar a gobiernos locales a preparar carteras de proyectos financiables a través de bonos verdes.

Sector privado

  • Iberdrola México emitió un bono verde por 13 mil millones de pesos mexicanos para financiar parques eólicos y solares.
  • En 2024, Fibra Uno (FUNO) se convirtió en la primera FIBRA mexicana en emitir un bono verde por US$ 650 millones, destinado a proyectos de eficiencia energética en inmuebles comerciales.

¿Cómo ayudan a las empresas?

  1. Acceso a financiamiento competitivo: Los bonos verdes suelen ofrecer tasas de interés más bajas debido a la alta demanda por parte de fondos verdes.
  2. Reputación y posicionamiento: Emisiones exitosas comunican liderazgo en sostenibilidad ante clientes, inversionistas y stakeholders.
  3. Cumplimiento con estándares internacionales: Estar alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y los Principios de Bonos Verdes de ICMA mejora el perfil ESG corporativo.
  4. Innovación y eficiencia operativa: Proyectos verdes suelen implicar la adopción de nuevas tecnologías, con efectos positivos sobre costos y resiliencia operativa.

¿Qué requisitos debes cumplir para emitir?

Para que un bono sea reconocido como "verde", el emisor debe cumplir con lineamientos como los de la ICMA (International Capital Market Association):

  • Uso de fondos claramente definido para proyectos verdes.
  • Proceso transparente de evaluación y selección de proyectos.
  • Gestión clara y trazabilidad de los recursos.
  • Reportes periódicos de impacto ambiental y uso de fondos.

Muchas veces, esto se acompaña de una opinión externa (Second Party Opinion) otorgada por entidades como Sustainalytics, Vigeo Eiris o CICERO, que evalúan la calidad y elegibilidad ambiental del bono.

Emitir bonos verdes no solo es una estrategia financiera, es una declaración de principios. Para las empresas que buscan trascender y liderar en un mercado que ya no tolera la indiferencia climática, los bonos verdes representan una oportunidad única para financiar el futuro sin hipotecar el planeta.

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