Lo legal vende mejor: todo lo que puedes hacer para proteger tu marca y reputación
¿Qué tan cerca está la inspiración del riesgo legal? En redes sociales y marketplaces proliferan productos que imitan a marcas reconocidas como Nike, Apple o Chanel. Aunque muchos se promocionan como “similares” o “inspirados en”, estas prácticas pueden constituir una infracción a los derechos de propiedad intelectual, con consecuencias tanto legales como reputacionales para fabricantes, distribuidores y vendedores.

Frente a este fenómeno, las empresas han reforzado sus estrategias de protección. Marcas globales ya implementan inteligencia artificial para detectar imitaciones en tiempo real, mientras plataformas como Instagram, TikTok y Facebook bloquean perfiles y eliminan contenido que infringe marcas registradas. En 2023, Amazon reportó la cancelación de más de 700,000 cuentas de vendedores por este tipo de violaciones, lo que refleja la magnitud del problema y el papel clave que juega la tecnología en la defensa del valor de marca.
Desde réplicas de perfumes hasta bolsos de diseñador o dispositivos electrónicos, la imitación comercial se ha normalizado tanto en entornos digitales como físicos. Aunque muchos vendedores y compradores creen que no hay consecuencias si se aclara que un artículo no es original, la ley dice lo contrario. “En muchos casos, las personas ni siquiera saben que están cometiendo una infracción. Pero el desconocimiento no elimina las consecuencias”, advierte Diana Karina Martínez, Of Counsel del área de Enforcement de la firma Arochi & Lindner.
La frontera entre la inspiración y la ilegalidad se cruza cuando se reproducen nombres, logotipos, empaques o elementos distintivos que pueden generar confusión. Esto no solo representa un riesgo legal para quien fabrica o comercializa estos productos, sino también una amenaza directa a la reputación de marcas consolidadas y a la confianza del consumidor. Por ello, Martínez recomienda a emprendedores y empresas tener claridad sobre lo que la ley permite y fortalecer sus prácticas de cumplimiento:
- Evita usar nombres o logotipos de marcas registradas: Frases como “inspirado en…” o “parecido a…” pueden violar la ley, incluso si se aclara que no son originales.
- Limita el uso de empaques o diseños que generen confusión: La legislación protege no solo el nombre, sino también la imagen, colores y estilo distintivo de una marca.
- Apuesta por productos originales o claramente diferenciados: Si un producto parece una copia, probablemente lo es. Optar por lo auténtico es también una estrategia de valor.
- Verifica antes de comercializar o revender: Asegúrate de que los artículos que distribuyes no infringen marcas. Solicita licencias o comprobantes si es necesario.
- Infórmate sobre tus derechos y obligaciones: El portal del IMPI ofrece recursos accesibles para empresas y profesionales que buscan actuar dentro del marco legal.
La propiedad intelectual fortalece los activos intangibles de una empresa, construye confianza con los consumidores y aporta valor competitivo a largo plazo. Elegir productos originales, desarrollar propuestas auténticas y respetar lo que otros han construido se integra a un entorno empresarial donde la innovación se valora y las marcas generan impacto sostenible. En una era donde todo está al alcance de un clic, actuar con conciencia marca la diferencia. Lo que parece una oportunidad hoy puede convertirse en un riesgo mañana. Elegir lo legal fortalece tu credibilidad y te abre oportunidades reales.